Tiene algo que es único e irrepetible. Neruda lo llamaba el corazón cortado de la tierra.
Dicen que la madera maciza, con todas sus imperfecciones naturales, dibuja unas líneas que solo se pueden seguir con los ojos del alma.
¿Que estamos hablando solo de una mesa? Tal vez. Igual que Venecia es solo una ciudad. Unos canales.
Pero a su manera, es una obra de arte en mitad de la laguna. Como una mesa, a su manera, es una escultura en tu hogar.
Un trozo de naturaleza que sigue vivo, con toda su historia marcada en sus surcos y vetas. Especialmente, si hablamos de los briccole venecianos que logran una segunda vida en forma de mesas y bancos únicos e irrepetibles.
¿Qué son los briccole?
Una briccola es cada una de las estructuras de roble que jalonan los canales de Venecia y señalan la zona navegable.
Sí. Esos palos que indican a los gondoleros el camino por el que remar por los brazos de agua de la Dama del Adriático.
¿Y si pudieras tener en tu casa una pieza de mobiliario fabricada a partir de esa madera?
Eso es lo que hace FGF Mobili. Convertir esas tablas en piezas exclusivas de diseño. La historia de estos fabricantes venecianos arranca en 1963.
En su pequeño taller artesano del interior del Veneto construían mesas y bancos con una idea clara: hacer de cada pieza una escultura. Tratar la madera maciza, el roble, como la joya que es.
Respetan la materia prima como se respetan a sí mismos, con unos sólidos principios éticos respecto al trabajo y sus trabajadores.
Es cierto que FGF dejó de ser un pequeño taller. Ahora es una industria del mueble en la que la segunda generación de la familia ha internacionalizado el negocio sin renunciar a los principios de sus padres.
- Calidad: mejora constante en la producción y en los demás procesos que acompañan el trabajo artesanal.
- Precisión: eliminar cualquier posible defecto en los procesos creativos. Las únicas imperfecciones que admite FGF son las que la madera tiene de forma natural.
- Responsabilidad: optar siempre por proveedores y clientes en los que poder confiar y crear una comunidad de amantes de los muebles de madera maciza.
- Atención al cliente: la satisfacción de la persona que vive con sus mesas, bancos y aparadores es la razón de ser de su trabajo. Las mesas de FGF duran para siempre.
Su misión es la misma de hace 55 años. Construir muebles personalizados de diseño exclusivo utilizando solo madera maciza, con el objetivo de lograr piezas que duren para toda la vida.
Líneas rectas y naturales. Las propias de la madera a la que solo tratan con aceites naturales.
- La mesa Ghost por ejemplo. Un increíble tablero macizo de roble con capacidad para hasta 12 comensales que parece flotar en el aire gracias a sus dos patas de vidrio.
- O la Crossing. En la que las patas se cruzan para lucir aún más la impresionante la tabla superior.
- O la Style, en la que un diseño, propio de un taller artesano, se convierte gracias a su genial sencillez en una pieza sofisticada y moderna.
Acompañar cualquiera de estas mesas con un banco es una delicia.
Y sentir en tus manos esa madera que durante años ha estado bañada en aguas venecianas tiene un encanto difícil de describir, ¿no te parece?